Implantación y seguimiento del balón intragástrico.
En España se utiliza la técnica del balón intragástrico desde hace 15 años y ha resultado el procedimiento no quirúrgico más efectivo para combatir la obesidad.
¿Cómo es la implantación del balón intragástrico? ¿Cuáles son los siguientes pasos?
La colocación del balón es un proceso indoloro. Es un procedimiento endoscópico (no quirúrgico) que se realiza bajo sedación y el paciente no nota absolutamente nada cuando se le coloca. La realización del procedimiento se hace en unos 15 minutos y en 1 hora el paciente ya puede ir a casa.
Una vez colocado el balón ¿Qué tratamientos hay que seguir?
La colocación del balón conlleva riesgos mínimos, pero es necesario llevar un control médico multidisciplinar posterior a la colocación. Existe un tratamiento dietético que enseña al paciente a comer de un modo distinto y por otra parte nuestro endocrino se encargará de vigilar aspectos como la diabetes o la hipertensión.
Adaptación al balón intragástrico
Los primeros días el paciente sentirá molestias a medida que su estómago se acostumbra a la presencia del balón. Puede sentir náuseas, o experimentar vómitos o diarrea hasta que su cuerpo se adapte.
Estas condiciones son normales y están previstas. Nuestro equipo médico proporciona al paciente instrucciones estrictas sobre su régimen de hidratación durante este periodo. Durante el primer día, es probable que sólo tome unos sorbos de agua, en los días posteriores es fundamental beber mucha agua y evitar comer alimentos sólidos.
La dieta a seguir durante los tres primeros días podrá incluir lo siguiente:
Zumos, leche, sopas o purés poco densos, gelatina y deberán evitarse los siguientes alimentos: Café, Bebidas gaseosas, Alimentos con grasa, Chocolate, Helados etc.
Es importante tener en cuenta durante las 24 horas posteriores a la colocación del balón que:
· No deben realizarse actividades físicas.
· El paciente debe beber líquidos fríos en pequeñas cantidades, empezando por una cucharadita, y aumentando la cantidad según su capacidad, de esta manera se disminuye el riesgo de sufrir náuseas o vómitos.
Durante estos días nuestros pacientes podrán telefonear a nuestro equipo médico para consultar cualquier reacción o molestia que sienta.
Después de varios días con una dieta de líquidos el paciente estará preparado para empezar la transición a alimentos semisólidos y posteriormente a sólidos. La rapidez de esta transición dependerá de su progreso y de cómo esté tolerando su cuerpo los líquidos.
Es importante realizar esta transición lentamente, sin intentar acelerar el proceso de adaptación.
Una vez finalizada esta transición el paciente comenzará a reunirse periódicamente con nuestro equipo de asistencia médica. El médico, dietista y demás especialistas tendrán una función importante en la evaluación de sus necesidades para crear un programa personalizado.
El éxito con el balón intragástrico dependerá de lo dispuesto que esté el paciente a aprender de su equipo y a adoptar en su vida diaria unos principios saludables.
Seguimiento del proceso y extracción del balón gástrico
Después de las dos primeras semanas su cuerpo ya se habrá adaptado al balón, estará siguiendo un plan de nutrición y habrá reanudado sus actividades normales.
Durante los seis meses siguientes es fundamental reunirse con el médico para controlar la pérdida de peso, y con el equipo de asistencia para que le instruyan según su progreso. Este periodo es importante para mantener la pérdida de peso después de que sea extraído el balón.
Durante el periodo que tenga el balón intragástrico implantado, el paciente deberá seguir con atención y comunicar cualquier cambio inusual en la manera de sentirse.
¿Cómo se quita el balón gástrico?
El procedimiento de extracción del balón es similar al de inserción. Se hace pasar un tubo por la boca, se desinfla el balón y se extrae por el esófago y la boca una vez desinflado.
A tener en cuenta antes de la extracción:
- El paciente no debe ingerir ningún alimento sólido 24 horas ni líquido 12 horas antes del procedimiento.
- El paciente debe acordar con alguien que le acompañe a su domicilio desde el centro de asistencia y que esté a su disposición durante un par de días.
Después de la extracción del balón el paciente seguirá estando bajo la supervisión del equipo de asistencia.